
Durante años nos hemos limitado a leer y analizar los viajes de otros, sin darnos cuenta que nosotros formamos parte de ese proceso y que podemos hacer mucho más que transmitir conocimientos, podemos...CREAR. Lo sencillo es limitarnos a indicar cuál es el camino que nuestros compañeros pueden tomar, pero somos mucho más, formamos parte de la aventura y una pieza clave, para todos juntos construir una nueva senda: aquella en la que utilicemos todas las herramientas, materiales y/o recursos puestos a nuestro alcance.
Cuando iniciamos un viaje, lo hacemos trazando primero una trayectoria, cuáles son los caminos por dónde podemos o debemos ir, para no perdernos y llegar a nuestro objetivo. Pero ese podemos o debemos ir puede variar a medida que avanzamos, tenemos que mantener la mente abierta en todo momento, porque quizás encontremos un atajo que nos haga el proceso más llevadero, que haga las etapas más interesantes y, como no, compartir cada una de nuestras experiencias con los demás.
Debemos, entre todos, CREAR Y TRANSMITIR dándole a nuestro bagaje un "aire nuevo" que nos lleve a nuestro destino cargados de nuevos retos y enseñanzas. Sabemos que aún nos queda camino que recorrer, pero junto a nuestros nuevos compañeros, la andadura se vuelve más interesante.
He de reconocer que, en principio, me deje llevar por emociones (miedo, confusión, ...) que entorpecieron el avance de mi aprendizaje, pero a lo largo del camino he ido adquiriendo conocimientos, incorporándolos a mi equipaje, transformando esas emociones (sorpresa, alegría,...), dando forma a nuevas ideas y explorando nuevos territorios, convirtiendo este viaje en una aventura emocionante, donde sólo es posible sentir SATISFACCIÓN.
No hay comentarios:
Publicar un comentario